Seguimos hasta Kobarid

Este es el desfiladero de Tolmin. Apenas entra la luz en determinados recodos y produce espectaculares reflejos de luz en el agua. En el recorrido hay varios puntos para visitar. Entre ellos una roca que quedó entre las dos paredes del desfiladero. La llaman "Medvedova glava in skakalce" que quiere decir algo como "cabeza de oso y puentes" aunque queda mas literario "puente de la cabeza de oso". Otro punto curioso es un torrente que aflora a una temperatura de entre 18,8º y 20,8º cuando la temperatura del Tolminka es de 5º a 9º .

Por fin os presento a la Marga, mi mujer y en este viaje compañera de sudores. Hacía tanto calor que todas las camisetas y camisas quedaban con las marcas de la sal producto de la sudoración.

Todo esta explicado en un folleto que te dan cuando pagas. Pero nada de español. Los idiomas de la zona son esloveno, italiano, inglés y alemán.

Río Tolminka

El recorrido en sí no es nada cansado y es accesible para todos, niños incluidos, pero la temperatura y humedad nos dejaron KO. Pero nada que no cure una Lasko, la cerveza eslovena por excelencia para acompañar una trucha de rio para mi y unas salchichas especialidad eslovena para Marga (no le gustan, pero no supo qué pedía). Y de postre una empanadilla rellena de una pasta de manzana y nueces. Especialidad eslovena pero que no me gustó mucho, pero hay que probarlo casi todo.

Emprendemos camino a Kobarid-Caporetto. Esta zona como antes de la guerra era italiana, todas las poblaciones tienen dos nombres, esloveno e italiano. Algunos se parecen y otros no.

Rio (reka) Soca al atardecer

Casi no llegamos a la i turística que cierra a las 19:00, pero nos dio tiempo a ir a una habitación que nos consiguió y volver. Era una habitación horrible, sin mas comentarios. No había nada más en toda la zona. Las oficinas de información locales controlan todos los alojamientos. Si te dicen que no hay nada, seguro que no lo hay. Pero los viajeros siempre se buscan la vida. Preguntamos en una casa que alquilaban habitaciones y la Natalia nos lo confirmó. Si i turística dice que no hay nada no hay, pero la i no controla los campings y la Natalia nos consiguió un apartamento IKEA en el Kamp Lazar. Una monada de IKEA. Completamente equipado de esta marca, completamente todo. Un poco caro, eso si. La ventaja es que hicímos un par de desayunos y cenas de super.